Trece personas, de los cuales ocho son extranjeras, fueron detenidos por la Brigada Investigadora de Trata de Personas (Bitrap) de la PDI en Arica, por su participación en el ingreso ilegal de más de 1.700 personas al territorio nacional. A través de la intercepción de sus comunicaciones, se logró conocer cómo operaba la banda. Algunos eran “Coyotes”, otros llevaban a los migrantes a lugares “seguros”, entregando PCR falsos, y cobraban entre 200 y 800 dólares por persona, dependiendo de los servicios entregados.
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