La continuidad de Manuel Pellegrini en el Real Betis Balompié se encuentra en un punto crítico, con su contrato actual expirando en junio de 2026. Mientras la selección chilena, conocida como la ‘Roja’, observa de cerca la situación, dos elementos fundamentales están obstaculizando la renovación del técnico. Según informaciones de medios españoles, las negociaciones se han estancado debido a discrepancias salariales y a los términos de la cláusula de salida. Pellegrini insiste en una mejora económica y en condiciones flexibles que le permitan una salida sin costes totales en caso de despido, aspectos que el club considera vinculados a la clasificación para la Liga de Campeones. Aunque el Betis mantiene una postura de calma, afirmando que no hay prisa, la incertidumbre persiste. En paralelo, la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP) ha mostrado interés, pero Pellegrini ha respondido que su prioridad inmediata es permanecer en el equipo español, esperando que la directiva tome la iniciativa para desbloquear las conversaciones. Este escenario subraya la complejidad de las renovaciones en el fútbol moderno, donde factores económicos y contractuales definen el futuro de los entrenadores.
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