Un torbellino se ha vuelto el viejo continente. A las protestas francesas contra la reforma a las pensiones planteadas por el Ejecutivo galo, se suma las huelgas y movilizaciones realizadas por más de 500 mil británicos, que protestan por la inflación que ha ascendido al 10.5%. Los sectores más afectados, como son salud, educación y transporte (buses y ferrocarriles), han salido a protestar el día de ayer en varias ciudades del Reino Unido, exigiendo aumento de sueldos, para poder afrontar de mejor forma el aumento en el costo de la vida. Manifestaciones como estas no se veían desde el 2011. Mientras tanto, en Francia, se movilizaron cerca de 2,8 millones de manifestantes el pasado 31 de enero, donde también estuvieron presentes las huelgas masivas. Nuevas protestas en toda la Galia están anunciadas para el 7 y 11 del mes en curso. Los manifestantes se niegan a aceptar el aumento de edad para jubilarse (de 62 a 64 años) y el tiempo que deben cotizar para lograr pensionarse (de 42 a 43 años).
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