A torso desnudo, mostrando las cicatrices de su doble mastectomía por cáncer, la convencional Alejandra Pérez, llamó la atención de sus colegas, al momento de exponer en la apertura del debate constitucional. “Hasta que valga la pena vivir”, se escribió en su fisurado pecho, mientras se lamentaba por la culpa que la invadió por tener los medios para operarse. Por respeto a las que no tuvieron dinero para tratarse, no reconstruiré mis pechos”, señaló.
Suscríbete al boletín:
Suscribete Gratis