En la mañana de este viernes 27 de enero, un nuevo bus pirata con migrantes ilegales fue descubierto llegando a Estación Central en Santiago, acrecentando la crisis migratoria en niveles imparables. Este hecho, refleja el grado de indefensión que se encuentra el país, que sólo hace pensar en una acción concertada, para hacer del tema de los inmigrantes, simplemente un lucrativo negocio. Es lo que ocurrió este viernes. Tras ser fiscalizado por la autoridad en Estación Central, el chofer del bus “pirata” se defendió a través de Chilevisión, señalando que son las agencias de viajes, quienes no fiscalizan y venden los pasajes a cualquier persona, sin importarle ni exigirle documentación alguna a los migrantes. “Como tripulación del bus, nosotros no tenemos cómo fiscalizar. A “Gentour”, la agencia de viajes, que por lo demás es dueña del bus, sólo les interesa vender y no les importa si entraron legal o furtivamente al país”, señala Jairo Sepúlveda, conductor de la máquina “pirata” que trajo desde el norte a los migrantes ilegales. “La agencia de viajes nos entrega en Iquique la lista de pasajeros y ya arriba, no podemos hacer nada, porque los mismos inmigrantes se enojan si les pedimos sus documentos. De 53 pasajeros que trajimos desde Iquique, 28 no tenían ningún papel que acreditara su condición en el país, es decir, eran ilegales”, sostiene el conductor. Según fuentes policiales, muchos de estos extranjeros en situación irregular, llegan a Estación Central, toman otro bus que los lleva a regiones, especialmente al Maule, donde son contratados como temporeros en las faenas frutales”, señalan.
Síguenos en:
Suscríbete al boletín:
Suscribete Gratis
