Hastiado de escuchar permanentemente palabras como “invasor” y “agresor”, con las cuales se referían a su país, el Canciller ruso, Serguéi Lavrov, optó por retirarse antes del término de la Cumbre del G20. Los líderes de los otros países, no quisieron ni siquiera tomarse la foto oficial del encuentro al lado de Lavrov. Tan poco tiempo estuvo el Canciller de la Federación Rusa, que no se pudo hablar del tema de que permita la salida de maíz y trigo almacenados en bodegas en Ucrania.
Suscríbete al boletín:
Suscribete Gratis