El número de desistimientos en la compra de viviendas está en aumento, y la tasa hipotecaria ha alcanzado su punto más alto en más de 14 años. Las restricciones en el acceso al financiamiento y su encarecimiento son las principales razones detrás de esta tendencia, llevando a que muchas personas renuncien a la opción de adquirir una propiedad nueva. El tipo de interés promedio de los créditos para vivienda ha llegado al 5.05%, marcando su nivel más alto desde abril de 2009. Esta situación está generando un impacto significativo en el mercado inmobiliario, ya que los compradores, enfrentando condiciones financieras más difíciles, optan por retirarse de sus planes de adquisición. El encarecimiento del crédito hipotecario, junto con las restricciones más estrictas para acceder a préstamos, está cambiando el panorama del sector inmobiliario, afectando tanto a compradores como a desarrolladores. El mercado observa con atención cómo estas tendencias podrían influir en la dinámica a corto y largo plazo, generando un desafío adicional para aquellos que buscan establecerse en una vivienda propia.
Síguenos en:
Suscríbete al boletín:
Suscribete Gratis
