Los resultados de las elecciones parlamentarias de 2025 han generado una profunda reflexión interna en Renovación Nacional (RN), marcada por críticas y divisiones que anticipan una competencia por la directiva del partido, programada para marzo del próximo año. La baja en la Cámara de Diputados, donde RN pasó de 19 a 13 escaños, ha sido calificada como «desastrosa» por figuras como la senadora Paulina Núñez, mientras que el expresidente Cristián Monckeberg señaló que el bloque Chile Vamos «ha cumplido su ciclo» y enfrenta un «fracaso total». Las críticas se centran en la actual directiva liderada por Rodrigo Galilea y Andrea Balladares, acusada de errores en alianzas y designación de candidaturas. Galilea reconoció que el pacto con Demócratas no rindió frutos electorales y atribuyó parte del revés a la baja votación de Evópoli y al éxito del Partido de la Gente en el norte del país. Sin embargo, destacó el desempeño en el Senado, donde RN conservó nueve cupos, incluyendo elecciones exitosas en regiones como La Araucanía y el Maule. Internamente, algunos dirigentes, como el diputado Diego Schalper, ven en estas críticas una maniobra oportunista de facciones disidentes, como la llamada derecha social, que no logró elegir a sus candidatos apoyados.
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