En la etapa decisiva de la campaña presidencial chilena, los tres candidatos de la derecha han adoptado una estrategia común: minimizar las disputas internas y concentrar sus ataques en el gobierno y la candidata oficialista, Jeannette Jara. Este enfoque quedó evidenciado durante el último debate organizado por la Asociación de Radiodifusores de Chile (ARCHI), donde José Antonio Kast, Evelyn Matthei y Johannes Kaiser evitaron confrontaciones directas entre ellos. El equipo de Kast ha priorizado la reducción de errores, manteniendo un perfil bajo en los debates y cediendo protagonismo a Kaiser, mientras refuerza propuestas emblemáticas como el endurecimiento de políticas migratorias. Los republicanos consideran que los riesgos de una exposición excesiva superan los beneficios, especialmente cuando calculan que Kaiser tiene pocas probabilidades de arrebatarle el segundo lugar. Por su parte, Johannes Kaiser ha buscado diferenciarse mediante temas más específicos y un tono frontal, pero evitando ataques directos a sus competidores de derecha. Su objetivo es consolidarse como figura emergente del espacio opositor, abordando temas como derechos humanos y beneficios carcelarios que otros candidatos prefieren mantener al margen.
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