El nuevo líder del Partido Comunista, Lautaro Carmona, ha destacado uno de los principales desafíos de su gestión: dar un rol protagónico al movimiento popular. En una entrevista, Carmona reconoció que su partido ha tenido diferencias con el Presidente Boric, especialmente en temas como el apoyo a Ucrania. Sin embargo, aseguró que existen coincidencias con el Gobierno en otros asuntos que son más que suficientes para demostrar su compromiso. Carmona subrayó que no habrá una subordinación de los objetivos del movimiento social y sindical a lo que el Gobierno pueda pensar, enfatizando la independencia de su partido y su enfoque en impulsar las demandas populares en el contexto político actual. Esta declaración refleja la determinación del Partido Comunista de mantener una posición firme en relación con sus principios y agendas clave.
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