El Vaticano ordenó una investigación contra el difunto sacerdote Michael McCoy, por su participación en la supuesta fiesta sexual que se llevó a cabo durante el período de confinamiento por COVID. La investigación está dirigida por el arzobispo de Liverpool, Malcolm Patrick McMahon. Según un informe en Firstpost, McCoy supuestamente fue acusado de organizar una «fiesta sexual de encierro» en un recinto contiguo a la Catedral de Newcastle, en Londres. El incidente salió a la luz cuando funcionarios de la iglesia católica investigaban la renuncia de Robert Byrne, ex obispo de Hexham y Newcastle. Según se informa, se suponía que McCoy ocuparía el puesto de Byrne como decano de la iglesia. Según los informes, McCoy convenció a muchos fieles para que se unieran a la supuesta «fiesta sexual de encierro», que se llevó a cabo en su alojamiento privado en diciembre de 2020, cuando se impuso un estricto encierro debido al coronavirus.
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