Cumpliendo prisión domiciliaria, en su departamento ubicado en el barrio de Constitución en Buenos Aires, pero obligada a usar tobillera electrónica, se encuentra la exPresidenta de Argentina, Cristina Fernández. La medida comenzó a cumplirse a partir del martes 17 de junio, según estableció la justicia trasandina. «Corresponde establecer que a partir del día de la fecha, Cristina Elisabet Fernández de Kirchner se encuentra, en calidad de detenida bajo la modalidad de prisión domiciliaria, cumpliendo la pena firme de seis años de prisión, inhabilitación especial perpetua para ejercer cargos públicos, accesorias legales y las costas del proceso que le fuera impuesta en esta causa», establece la resolución judicial emitida. Las dos razones que permitieron que la exjefa de Estado trasandina cumpliera su condena en su domicilio, es su edad, al ser mayor de 70 años, y el haber sido objeto de un intento de asesinato. Fernández fue condenada por el delito de administración fraudulenta en contratos de obras públicas en la provincia de Santa Cruz.
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