De acuerdo a un reportaje realizado por Televisión Nacional de Chile, en la Región del Maule funcionaba una red de explotación sexual infantil, conformada por un psicólogo que trabajaba directamente con jóvenes y niños, además de un cocinero que se ganaba la confianza de los menores y un indigente encargado de reclutarlos. Lo más preocupante era que estos adolescentes y niños estaban a cargo del Estado. En el año 2024, el Servicio Nacional de Protección Especializada de la Niñez, presentó 10 denuncias por explotación sexual de niñas, niños y adolescentes en residencias del sistema en la región del Maule. Sin embargo se estima que al menos unos 40 menores que estaban bajo la protección del Estado fueron violentados sexualmente, utilizando la manipulación en niños que están carentes de verdaderos afectos, con un largo historial de vulnerabilidad. Tras tres años de investigación se pudo identificar a tres presuntos autores de los delitos, entre ellos un hombre de nacionalidad peruana identificado con las iniciales A.J.V.V, cocinero, que primero tenía una relación de amistad con las menores, para que luego se convirtieran en sus parejas, suministrándoles drogas, alimentos y vivienda. Otro sería un psicólogo con las iniciales C.B, que fue acusado por un niño de 14 años, de una residencia de hombres, por el delito de violación. El tercer implicado sería un indigente con la iniciales C.A.J.B. Cada uno de ellos arriesga 20 años de prisión.
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