El Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) ha iniciado una campaña de fiscalizaciones a nivel nacional dirigida a clínicas y centros veterinarios, con el objetivo de verificar el cumplimiento de la Ley del Consumidor. Esta iniciativa, coordinada con el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), incluye la revisión de alimentos y medicamentos para mascotas, asegurando la inocuidad y el uso responsable de estos productos. Las infracciones detectadas pueden acarrear sanciones económicas de hasta 300 UTM, equivalentes a aproximadamente $21 millones por cada incumplimiento. Entre los aspectos fiscalizados se encuentran la transparencia en la información de precios, la ausencia de limitaciones injustificadas en medios de pago, el cumplimiento de promociones publicitadas, y la entrega adecuada del Consentimiento Informado para procedimientos médicos. Además, se verifica la identificación del personal, la implementación de protocolos de atención preferencial y la disponibilidad real de servicios anunciados, como la atención 24/7. Según datos del Sernac, en lo que va del año se han recibido alrededor de 600 reclamos contra veterinarias, con un 41% relacionados con medicina general, un 29% con hospitalizaciones y un 14% con exámenes veterinarios. Solo el 22% de estos reclamos obtuvo una respuesta favorable, lo que subraya la necesidad de estas inspecciones. Las autoridades han enfatizado que, dado el creciente papel de las mascotas en las familias chilenas, es crucial garantizar servicios veterinarios de calidad y transparentes, reforzando la confianza de los consumidores.
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