“Hemos detenido a los cuatro asesinos del Crocus City Hall”, afirmó este sábado, el Presidente de Rusia, Vladimir Putin, refiriéndose a los autores materiales de la sangrienta masacre que ha dejado al menos 143 muertos y más de 100 heridos en el popular centro de eventos moscovita. En un vídeo publicado por la web del Kremlin, Putin denunció este “acto terrorista, sangriento y bárbaro” y aplaudió la labor tanto de las fuerzas de seguridad como de los servicios de rescate y la población civil que auxilió a los supervivientes. El jefe de Estado de la Federación rusa, que este domingo será día de luto nacional al tiempo que ha declarado “medidas adicionales antiterroristas y antisabotaje” para “impedir que quienes están detrás de este baño de sangre cometan un nuevo delito”. Aunque el atentado se lo atribuyó el Estado islaámico, el mandatario ruso evitó mencionar quién estaba detrás de los masivos asesinatos. Lo que sí afirmó, es que los asesinos fueron detenidos cuando se disponían a cruzar hacia la frontera ucraniana, donde según Putin, “les habían preparado una entrada en el lado ucraniano para cruzar”.
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