El entrenador Ramón Díaz ha desatado una ola de críticas tras realizar comentarios discriminatorios durante un partido de fútbol, afirmando que «el fútbol es para hombres, no para chicas». Estas declaraciones se produjeron en el contexto de protestas por un gol anulado, generando un amplio rechazo en las redes sociales y la comunidad deportiva. En respuesta, el Inter de Porto Alegre, club al que está vinculado Díaz, emitió un comunicado oficial disculpándose por lo que calificó como una declaración «desafortunada», subrayando su compromiso con la igualdad de género en el deporte. Este incidente resalta la persistencia de estereotipos en el ámbito futbolístico y la importancia de promover la inclusión, especialmente en un momento en que el fútbol femenino gana visibilidad y apoyo a nivel global. La situación ha llevado a reflexiones sobre la necesidad de una mayor educación y concienciación para erradicar actitudes sexistas en el deporte profesional.
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