El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, advirtió este viernes al grupo palestino Hamas, que cada uno de sus miembros debe considerarse a sí mismo, como «hombre muerto». La violencia entre Israel y Hamás se ha intensificado, provocando más de 2.800 bajas en ambos lados, después de que el grupo terrorista palestino lanzara un ataque sorpresa contra Israel la semana pasada, desencadenando una guerra que va creciendo día a día. El recuento de muertos en el lado israelí llegó a alrededor de 1.300, mientras que los ataques aéreos de Israel en Gaza han matado a más de 1.500 personas, informó la BBC. Con una baja considerable en su imagen, el conflicto llegó para “salvar” a Netanyahu de la debacle, ya que tras el ataque, llamó a conformar un gobierno de emergencia y un gabinete de guerra, logrando asociarse con el líder de la oposición Benny Gantz. Gantz, quién hoy dijo: «Hay un momento para la guerra y… para la paz. Ahora es el momento para la guerra». «Ahora somos todos un solo bando, el bando del pueblo de Israel», añadió. El sentimiento de unidad nacional y la sed de venganza por sus muertos es tan grande, que el Ministro de Defensa, Yoav Gallant, no tuvo reparos en afirmar: «Borraremos a Hamas de la faz de la tierra».
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