“Una noche tranquila, en buenas condiciones”, habría pasado el Papa Francisco, de 86 años, luego que el miércoles pasado fuera intervenido por un problema de una hernia abdominal. Así lo informaron fuentes del Vaticano, quienes comentaron que la operación se realizó en el hospital Gemelli en Roma. El médico que operó a su Santidad, Sergio Alfieri, señaló que había sido una intervención “benigna”, sin secuelas ni otras enfermedades. El Sumo Pontífice deberá ahora hacer reposo en el recinto de salud, coincidentemente en el mismo cuarto que utilizó muchas veces el Papa Juan Pablo II. En un comunicado a través de sus redes sociales, Jorge Mario Bergoglio, pidió a los fieles que recen por él para una pronta recuperación.
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