En un fallo judicial significativo, el 12vo Juzgado de Garantía de Santiago ha dictado prisión preventiva para 62 imputados, incluyendo 42 exfuncionarios de Gendarmería, en el marco de la Operación Apocalipsis. Esta investigación, liderada por la Fiscalía Metropolitana Occidente, ha expuesto una extensa red de corrupción al interior de la cárcel Santiago I, donde los acusados enfrentan cargos por delitos como cohecho agravado, soborno, asociación criminal, tráfico de drogas y lavado de activos. El juez Francisco Ramos fundamentó la medida cautelar al acreditar que los imputados, integrados en células criminales, poseían la capacidad económica para corromper el sistema penitenciario, representando un riesgo para la investigación si permanecían en libertad. Según los antecedentes, los gendarmes facilitaban el ingreso ilegal de artículos prohibidos, como celulares, drogas y alcohol, cobrando entre $10.000 y $400.000 por estos servicios, e incluso permitían el acceso irregular de mujeres para comercio sexual. La operación, que abarcó múltiples regiones de Chile, resultó en la incautación de 183 cuentas bancarias, 11 vehículos, armas y drogas, subrayando la magnitud del esquema delictivo. El fiscal jefe Occidente, Marcos Pastene, destacó la relevancia de las infracciones patrimoniales vinculadas al caso, reforzando la gravedad de los hechos. Este desarrollo judicial marca un paso crucial en la lucha contra la corrupción institucional, enviando un mensaje claro sobre la aplicación de la ley en casos de crimen organizado dentro del sistema carcelario.
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