El ministro de Justicia, Jaime Gajardo, abordó recientemente la situación del sistema penitenciario nacional, destacando los avances tecnológicos implementados pero advirtiendo sobre los desafíos persistentes. En el marco de la «Operación Apocalipsis», que resultó en la detención de 70 personas, incluyendo 47 gendarmes, por presunta corrupción, Gajardo enfatizó que las mejoras en infraestructura pueden verse comprometidas si no se combaten las redes ilícitas internas. Gajardo señaló que se han introducido sistemas de inhibición de señales, más escáneres corporales y máquinas de rayos X, así como limpieza de perímetros en centros penitenciarios. Sin embargo, subrayó que estos esfuerzos «pueden no tener resultados» si los funcionarios participan en actividades corruptas, como la reventa de teléfonos celulares confiscados a internos o la evasión de controles de seguridad. Para enfrentar este problema, el ministro describió una estrategia integral desarrollada desde marzo de 2023, en colaboración con el Ministerio Público, la Policía de Investigaciones y Carabineros. Esta iniciativa busca identificar y procesar a aquellos que «traicionan los juramentos en Gendarmería», asegurando que los involucrados en delitos sean removidos y encarcelados.
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