Multas de hasta 5 UTM (cerca de $346.000), podrían recibir quienes boten colillas de cigarrillos o chicles en la vía pública en la comuna de Ñuñoa, luego que este miércoles el Concejo Municipal de esta comuna, aprobara una ordenanza que endurece las sanciones por incivilidades como estas. Según detalló el municipio, entre las conductas sancionadas se encuentran «arrojar chicles o colillas de cigarro en calles y plazas, no recoger las heces de mascotas y orinar en la vía pública, entre otras prácticas que afectan la convivencia y el entorno comunal», afirmaron desde el Concejo ñuñoino. «Queremos que la comuna se sienta respetada. No se trata de perseguir a los vecinos, sino de generar conciencia de que la vía pública es de todos y quienes la ensucian o la dañan afectan la calidad de vida de la comunidad”, afirmó el alcalde Sebastián Sichel. El jefe comunal agregó que «no vamos a normalizar que se bote basura en las calles o que se ocupen nuestros espacios de manera indebida. El mensaje es simple: en Ñuñoa hay respeto, y quien no cumpla enfrentará sanciones claras». La nueva normativa, podría ser replicada en otros municipios del país, lo cual generaría no solo potenciales ingresos a las arcas comunales, sino un patrón de conducta que podría cambiar a la sociedad chilena.
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