Con éxito, se realizó este jueves el primer vuelo privado del Virgin Galactic, proyecto que por más de 20 años el multimillonario británico Richard Branson, dueño de la compañía Virgin, había estado esperando concretar, tras fundar la empresa en el 2004. La nave, propulsada por cohetes de Virgin Galactic, VSS Unity, se elevó por el desierto de Nuevo México, alcanzando una altura de aproximadamente 85 kilómetros. El vuelo llevaba a bordo a tres tripulantes y tres científicos italianos, quienes realizaron diversos experimentos en la ingravidez que vivieron durante la travesía. Branson espera que este primer vuelo comercial inaugural, pueda ser la punta de lanza para operar despegues al espacio mensualmente.
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