Un terremoto de magnitud 7,6 sacudió el centro y oeste de Japón, a lo largo de las regiones costeras de las prefecturas de Ishikawa, Niigata y Toyama, este lunes 1 de enero de 2024, dejando un saldo de cuatro muertos. Tras una serie de fuertes temblores, la Agencia Meteorológica de Japón (JMA), habría emitido una alerta de tsunami en las zonas costeras de estas prefecturas. Según la JMA, este primer día del nuevo año, se produjo una sucesión de 21 movimientos telúricos, con magnitudes que oscilan entre 4,0 y 7,6, en poco más de 90 minutos. El primer ministro japonés, Fumio Kishida, en un discurso televisado, pidió a los ciudadanos que sigan atentamente las órdenes de evacuación. También advirtió sobre posibles nuevos temblores más poderosos seguidos de olas de tsunami. Se pronosticó que un posible tsunami, con olas de al menos cinco metros, azotaría la misma región, dijo la agencia meteorológica del país. Según el Centro de Alerta de Tsunamis del Pacífico con sede en Hawái, era posible que se produjeran peligrosas olas de tsunami en un radio de 300 kilómetros (190 millas) del epicentro del terremoto a lo largo de las costas de Japón.
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