La Oficina Central de Estadísticas de Israel, informó este lunes que la economía del país experimentó una fuerte contracción del 19,4%, hecho que coincide con el inicio de la guerra contra el grupo islamista Hamás. La caída de la economía israelí, sería la más alta desde el segundo trimestre del 2020, cuando esta se derrumbó en un 305 debido a la pandemia del coronavirus. El organismo estatal, señaló asimismo que el consumo privado en el período de octubre a diciembre, se desplomó un 26,9% y la importación de bienes y servicios se redujo un 42,4%. El conflicto bélico con Hamás, habría influido drásticamente en la baja en la importación de bienes y servicios cayó un 6,9% en 2023, tras aumentar 12% en 2022, mientras que las exportaciones de bienes y servicios cayeron un 1,1% en 2023, frente al aumento del 8,6% el año anterior. La agencia Standard & Poors ya rebajó la perspectiva crediticia de Israel de “estable a negativa” por el riesgo de expansión del conflicto; mientras que la otra gran agencia crediticia, Fitch, puso a Israel «bajo vigilancia negativa» por el mismo motivo.
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