Luego que el abogado Juan Pablo Hermosilla, hermano y defensor en el Caso Audios, Luis Hermosilla, cuestionara duramente las declaraciones del Presidente Gabriel Boric, por la prisión preventiva de su cliente, calificándolas como una clara “intervención política” del Gobierno, sus dichos recibieron una rápida respuesta por parte del Ejecutivo. “Mi hermano no está siendo tratado como una persona común y corriente”, afirmó el defensor del imputado. “Toda la vorágine en torno a su enjuciamiento, responde a una “decisión política, ilegal e inconstitucional”. El defensor emplazó además “si vamos hablar de hipocresía, entonces abramos el teléfono de Luis Hermosilla, ábranlo entero y veamos qué fiscales le pedían favores, qué ministros le pedían favores a Luis Hermosilla”. Las acusaciones del defensor del ahora encarcelado abogado, fueron rápidamente abordadas por autoridades del Gobierno. La ministra del Interior, Carolina Tohá y el ministro de Justicia, Luis Cordero, arremetieron contra sus dichos. “Si tiene alguna acusación que hacer la defensa del señor Hermosilla que la haga. En mi caso nunca he tenido comunicaciones ni favores de ningún tipo”, subrayó la ministra Tohá. De la misma manera, el ministro Cordero cuestionó “que un abogado a cargo de la defensa (de Luis Hermosilla) amedrente a fiscales y ministros, a jueces, mediante la prensa, me parece inaceptable”, expresó el secretario de Estado.
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