En octubre de 2024, las perspectivas para el mercado de las cerezas en Chile eran optimistas con una proyección de un aumento del 59% en las exportaciones, alcanzando un total de 657.935 toneladas, un récord para el sector. Estas exportaciones estaban en gran parte destinadas a China, aprovechando la demanda del Año Nuevo Chino, una festividad donde las cerezas son especialmente valoradas como símbolos de buena suerte y prosperidad. Sin embargo, este aumento en la producción ha llevado a un exceso de oferta en el mercado chino, resultando en una caída significativa de los precios de las cerezas, lo que ha preocupado a los productores y a la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA). La situación actual muestra que aún queda más del 50% del volumen de fruta por comercializar y los precios están notablemente más bajos en comparación con la temporada anterior. La respuesta del sector incluye un llamado a mejorar la coordinación y la calidad de las exportaciones. Antonio Walker, presidente de la SNA, ha enfatizado la necesidad de empoderar al Comité de la Cereza para homogeneizar la calidad de las frutas exportadas y asegurarse de que solo las cerezas de mejor calidad sean enviadas al exterior. Además, se plantea la necesidad de diversificar los mercados de exportación más allá de China, mirando hacia destinos como Estados Unidos, Europa, América Latina y potencialmente India, para reducir la dependencia del mercado chino y estabilizar los ingresos del sector.
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