El presidente de Francia, Emmanuel Macron, pidió a los padres franceses a mantener a sus hijos adolescentes en casa, para así poder sofocar las protestas que se extienden por todo el país, informó AP. El Jefe de Estado galo ha dicho que las redes sociales y los videojuegos han «intoxicado» a los alborotadores. El llamado de Macron, llega como un intento desesperado para tratar de contener la ola de disturbios que sacude el país desde hace tres días, tras la muerte de Nahel, un joven de 17 años, asesinado por un policía el pasado martes en un control en Nanterre, uno de los barrios pobres de la periferia de París. En la madrugada del viernes la violencia se exacerbó, con casi 900 detenidos, saqueos e incendios en numerosas ciudades francesas. Los altercados ya no son sólo en las barriadas de las ciudades, sino que se han extendido al centro de las mismas como pasó ayer en Marsella o París. Desde el Palacio del Elíseo, se anuncio que se desplegará más policías para controlar los disturbios.
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