Un nuevo bochorno público, protagonizo este jueves el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, al señalar que el presidente ruso, Vladimir Putin, está «perdiendo la guerra en Irak». En lo que podría entenderse como un “lapsus linguae” o “desliz verbal”, el Mandatario estadounidense, estaba claramente refiriéndose a Ucrania y no Irak, pero lamentablemente su “prontuario” de errores, lo persigue. Protagonista de numerosos equívocos, el jefe de Estado norteamericano está en el ojo del huracán por sus acciones y dichos fuera de lugar, que son interpretados por sus críticos como señales de una posible demencia senil, hecho que está siendo claramente aprovechado por los republicanos, de cara a las elecciones presidenciales de noviembre, donde Biden ya instaló su nombre en la papeleta para una potencial reelección en su cargo.
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