Luego que el delegado presidencial, Gonzalo Durán, dijera en la mañana de este martes, que el gobierno está evaluando suspender las clases en la Región Metropolitana el 11 de septiembre ante la posibilidad de disturbios en las calles de la ciudad, los diputados de la UDI, Cristián Labbé y Sergio Bobadilla, criticaron dicha posibilidad. “El hecho que el Ejecutivo esté estudiando la posibilidad de que no haya clases este miércoles y restarle el derecho a los niños, niñas y adolescentes a recibir su educación, es hacerle el juego a los violentistas”. Así lo explicaron los legisladores gremialistas, que acusaron que una eventual suspensión de clases significaría “la rendición total de este gobierno a la violencia, cuando su primera misión es resguardar el orden público y asegurar no sólo el libre tránsito de la ciudadanía, como así también asegurar a los estudiantes y sus familias el derecho a la educación”, indicaron. “Podemos entender que esta fecha concita mucho interés y habrán grupos que realizarán actos públicos”, continuaron los diputados UDI, junto con afirmar que aquello “no se puede transformar en actos de vandalismo y destrucción del mobiliario público. Ya vivimos eso con el octubrismo en 2019 y este gobierno debe promover la paz social”, afirmaron.
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