El diputado de Renovación Nacional, Eduardo Durán, acudió este lunes a Contraloría, para que se pronuncie sobre un eventual conflicto de interés y vulneración a la probidad administrativa, en el marco de la adjudicación de un contrato por más de $23 millones a la empresa Rita Spa, de la cual la subsecretaria del Ministerio de las Culturas, Noelia Salas, fue fundadora y socia hasta 2022. “He venido a poner constancia de los antecedentes a la Contraloría porque estamos en presencia de un acto muy dañino para la transparencia que el país exige de nuestras autoridades. No es posible que la empresa que ella fundó y se dedica a la producción de eventos artísticos, se adjudicara el 28 de septiembre de 2022, un convenio por la realización del evento IMESUR 2023, y que en diciembre firmara el contrato, ya trabajando como asesora del ministerio, siendo que aún pertenecía a dicha empresa. Eso es impresentable y hoy formalicé una denuncia para terminar de una vez por todas con este tipo de prácticas”, dijo el legislador. El diputado RN afirma que “la corrupción de este gobierno no tiene límites. La anterior subsecretaria, Andrea Gutiérrez, también debió salir por la adjudicación de dos proyectos a una institución de la que ella había sido directora”.
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