La exembajadora chilena en el Reino Unido, Susana Herrera, presenta una demanda histórica contra el fisco. Solicita una compensación de $190 millones y disculpas públicas por daños a su integridad. Denuncia presiones de la Cancillería y discriminación. La demanda revela chats en los que sugieren «submarinearse» ante la prensa. Herrera se vio obligada a renunciar en medio del «Caso Convenios». Además, pide que las disculpas sean transmitidas directamente al gobierno británico. La situación comenzó con cambios en la Cancillería y acusaciones de filtraciones para desprestigiarla.
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