El sector salmonicultor chileno atraviesa una fase de baja productividad y declive en las exportaciones, evidenciando un descenso del 3% en sus ingresos por ventas al extranjero, totalizando US$5.768 millones en los primeros once meses de 2024. Este resultado ubica a la industria por detrás de la frutícola, la cual ha experimentado un crecimiento del 20% en comparación con el año anterior. La industria frutícola ha logrado acumular exportaciones por US$6.968 millones, consolidándose como el segundo mayor sector exportador del país después del cobre, destacando especialmente por el alto rendimiento de las exportaciones de cerezas. A pesar de ser el segundo mayor productor mundial de salmón, Chile observa una disminución significativa en la relevancia de esta industria dentro del comercio exterior. La situación del sector salmonicultor es aún más crítica al compararla con el sector forestal, que también ha mostrado un notable crecimiento del 12% en el mismo periodo, alcanzando exportaciones por US$5.764 millones. Estos desafíos subrayan la necesidad de condiciones más favorables para la salmonicultura, de modo que pueda continuar su desarrollo y contribuir eficazmente a la economía nacional, según señala Arturo Clement, presidente de Salmon Chile.
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