La Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) de Estados Unidos ha impuesto una multa sustancial de USD 6 millones de dólares al consultor político demócrata Steve Kramer. Esta sanción propuesta es una respuesta al uso de inteligencia artificial por parte de Kramer, para simular la voz del presidente Joe Biden en miles de llamadas automáticas. Kramer encargó estas llamadas durante su trabajo con el candidato presidencial Dean Phillips, dirigiéndose a los votantes de New Hampshire durante las elecciones primarias del Estado. Las llamadas automáticas presentaban una voz generada por IA que emulaba a la de Biden, lo que disuadía a los votantes de participar en las elecciones primarias. Esta táctica fue una reacción a un tecnicismo que dejó el nombre de Biden fuera de la boleta electoral y al posterior intento de Kramer de socavar una campaña por escrito para el presidente. El 21 de enero, la voz deepfaked informó a los votantes que su voto «marca la diferencia en noviembre, no este martes», una declaración que los funcionarios han identificado como una interferencia electoral. A raíz de estos acontecimientos, la FCC rápidamente tomó medidas para reforzar la Ley de Protección al Consumidor Telefónico de 1991, que prohibía las llamadas automáticas con voces artificiales, como son las generadas por la IA.
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