La Corte de Apelaciones de Santiago rechazó una apelación de Transbank contra una resolución de la Comisión para el Mercado Financiero (CMF), que ordenaba terminar con el servicio de adelantamiento de cuotas. Este servicio permitía a los comerciantes recibir anticipadamente el dinero de ventas realizadas en cuotas, mediante un acuerdo con Transbank que incluía el pago de un porcentaje adicional sobre la venta. El fallo, dictado por un panel compuesto por los ministros Juan Manuel Muñoz Pardo, Mario Rojas González y Marisol Rojas Moya, fue unánime. La Corte determinó que no hubo infracción legal en la resolución de la CMF, destacando que el servicio cuestionado no es esencial para el funcionamiento de Transbank como operador de tarjetas, y que más bien se trata de un servicio accesorio.
Transbank había argumentado que el servicio era beneficiario para las pequeñas y medianas empresas, impulsando sus ventas. Sin embargo, la Corte explicó que, aunque el servicio podría aumentar las ventas, no es indispensable para el giro principal de la empresa. La sentencia comparó el adelantamiento de cuotas con el factoring, notando que ambos procesos consisten en el adelanto del pago inicial, pero uno se aplica a facturas y el otro a transacciones de tarjetas de crédito. El fallo confirmó que la CMF actuó dentro de su competencia y conforme a la ley al exigir que Transbank cesara inmediatamente este servicio, concluyendo que el adelantamiento de cuotas no es necesario para el desarrollo del negocio principal de Transbank, y por lo tanto, su eliminación fue justificada.
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