En el contexto del día mundial de la salud mental, que se conmemora hoy 10 de octubre, especialistas destacan que los trastornos mentales en Chile arrojan cifras alarmantes y que existe una grave brecha entre su alta prevalencia y el escaso presupuesto público destinado a su tratamiento y prevención. Según el “Termómetro de la Salud Mental en Chile 2023”, realizado por UC y ACHS, un 17,5% de las personas encuestadas exhibieron síntomas asociados a una probable presencia o sospecha de este tipo de problemas, un aumento de dos puntos porcentuales comparados a la entrega anterior, principalmente impulsada por un deterioro en mujeres. Pese a las cifras, Chile continúa presentando un significativo déficit en su financiamiento de salud mental si se le compara con el promedio mundial. El presupuesto fiscal destinado a este ítem apenas supera el 2% del total del presupuesto en salud, cifra que está muy por debajo del 5% que se propuso como meta en el Plan Nacional de Salud Mental y Psiquiatría de los períodos 2000-2010 y 2015-2025. A su vez, la cobertura de atención en salud mental en Chile alcanza apenas al 20% de la población, mientras que en países de medianos ingresos la cobertura llega a un 50%.
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