“Desgraciadamente, gente como Sergio Onofre Jarpa terminaron sus días impunes, pese a todas las tropelías que cometieron“, fue la frase dicha este domingo por el Presidente Gabriel Boric, en su discurso, en el Museo de la Memoria, en el marco de los 500 años del Golpe de Estado, que recuerda a los dirigentes gremiales que lucharon contra la dictadura, misma que generó la inmediata polémica al interior de Renovación Nacional. El mandatario acusó al fundador de RN de cometer “tropelías”, mientras fue Ministro del Interior del gobierno militar, desde donde se ensañó contra muchos dirigentes sociales contrarios a la dictadura, tales como Rodolfo Seguel y otros, escapando de toda sanción y terminando sus días impune de castigo. El Jefe de Estado, aprovechó de cuestionar a quienes reivindican el golpe de Estado de 1973 y afirmó que “no es separable el Golpe de Estado de las violaciones a los Derechos Humanos”. “Vamos a haber crecido como sociedad si somos capaces de concordar algo mínimo: que ninguna crisis, ninguna diferencia, por muy grande que sea, justifica violentar la democracia; y violar los derechos humanos de quienes piensan distinto. No pedimos tanto, pero no pedimos menos”.
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