Destituidos de sus funciones quedaron 29 funcionarios de la Municipalidad de Molina, luego que hicieran abuso de licencias médicas para salir del país, según informó este martes el propio alcalde de la comuna, Felipe Méndez. Fue la Contraloría General de la República (CGR), la encargada de presentar las irregularidades que abarcan a funcionarios públicos de todo el país. El organismo contralor instruyó iniciar los respectivos sumarios administrativos. En el caso de Molina, además de la destitución se les sancionó con la inhabilidad para ejercer cargos públicos por cinco años. “Aquí no hay intocables”, expresó el jefe comunal, sosteniendo que el servicio público está pensado para servir a la gente y no para aprovecharse del cargo. Dentro de los funcionarios desvinculados hay directores de departamento e incluso algunos con más de 30 años de servicio, que estaban trabajando en las áreas de Salud y Educación principalmente. El alcalde Méndez comentó que “Molina merece respeto y mi deber es velar porque las reglas se cumplan, caiga quien caiga”, en un claro compromiso con resguardar los recursos públicos. Capítulo aparte, lo protagonizó el director de Control Interno, Hugo Soriano, quien no habría tomado de muy buena forma su desvinculación y se negaba tajantemente a dejar las dependencias del municipio, generando caos entre los funcionarios. Tras horas de estar encerrado en su oficina y tras meditarlo, finalmente recapacitó y abandonó pacíficamente el edificio consistorial.
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