Hasta en cuatro semanas se podría retrasar la pudrición de frutas, al usarse un hidrogel creado por una científica de la Universidad Católica del Maule (UCM) y su equipo de investigación. Compuesto en base a algas y una resina producida por las abejas, el hidrogel creado por la doctora Sara Cuadros, profesora titular de la Universidad Católica del Maule, se alza como una excelente barrera protectora para la fruta de exportación, de tal modo que pueda llegar en las mejores condiciones a sus destinos al otro lado del mundo. “Todo depende de la temperatura de conservación, pero si la fruta se mantiene en frío, el hidrogel atrasa el surgimiento de pudrición en tres o cuatro semanas al menos. Si hay quiebre de la cadena de frío, el efecto es de una o dos semanas”, sostiene la doctora Cuadros.
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