La campaña de la candidata oficialista, militante del Partido Comunista (PC), enfrentó un momento crítico tras la viralización de un video antiguo de su asesor Darío Quiroga, que contenía comentarios clasistas. En respuesta, la candidata Jara se desmarcó públicamente de dichas declaraciones, enfatizando que «no es su estilo» y expresando su rechazo a expresiones que fomenten divisiones sociales. Este incidente, ocurrido en el contexto de las elecciones de 2025, subraya la importancia de la coherencia discursiva en la política y cómo las controversias en redes sociales pueden impactar la imagen de los candidatos. La rápida reacción de Jara busca mitigar posibles daños a su campaña, reafirmando su compromiso con un mensaje inclusivo y alejado de estereotipos. Analistas señalan que tales deslizamientos pueden influir en la percepción pública, especialmente en elecciones competitivas donde cada voto cuenta. La situación refleja desafíos comunes en la gestión de equipos de campaña y la necesidad de mantener una comunicación alineada con los valores declarados.
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