Los Chicago Bulls han logrado un hito que no se veía desde la época dorada de Michael Jordan: un inicio perfecto de 5-0 en la temporada NBA 2024-25. Esta racha victoriosa, la primera desde la campaña 1996-97, ha generado un renovado optimismo en una franquicia que llevaba años alejada de la élite. Tras la disolución del equipo campeón en 1998, los Bulls experimentaron un prolongado declive, con solo dos apariciones en playoffs en la última década y tres años consecutivos fuera de la postemporada. El equipo se destaca como el único invicto en la Conferencia Este y uno de los tres en toda la liga, junto a San Antonio Spurs y Oklahoma City Thunder. En su impecable recorrido, han superado a rivales como Knicks, Magic, Hawks y Pistons, todos aspirantes a playoffs. El australiano Josh Giddey emerge como figura clave, promediando 22 puntos, 8.8 rebotes y 8 asistencias, mientras que Nikola Vucevic, Ayo Dosunmu y Matas Buzelis aportan consistencia al juego colectivo. Aunque cuatro de las cinco victorias se lograron en casa, el entrenador Billy Donovan y su plantilla mantienen la calma, conscientes de que la temporada es larga. Giddey refleja este espíritu: «Cada noche alguien distinto destaca, fortaleciéndonos como grupo». Este inicio prometedor reaviva la esperanza entre los aficionados, recordando los días de gloria mientras se enfrentan al desafío de mantener el rendimiento en giras fuera de casa.
Suscríbete al boletín:
Suscribete Gratis




