La ministra de la Mujer y Equidad de Género, Antonia Orellana, enfrenta crecientes críticas de la oposición tras revelarse una supuesta negligencia del Servicio Nacional de la Mujer y Equidad de Género (Sernameg) en el caso de Nabila Rifo. Según informes de Radio Biobío, el agresor de Rifo, Mauricio Ortega, obtuvo libertad condicional debido a la falta de representación legal de la víctima en una audiencia clave, luego de que la abogada asignada fuera removida y el caso no se reasignara. En respuesta, diputados de Renovación Nacional enviaron una carta formal al Presidente Gabriel Boric solicitando la remoción inmediata de Orellana y de la directora nacional del Sernameg, argumentando que esta situación erosiona la confianza pública en instituciones diseñadas para proteger a las mujeres. Los legisladores cuestionaron la ausencia de autocrítica de la ministra y afirmaron que las promesas de un gobierno feminista han quedado en eslóganes vacíos, sin acciones concretas. Además, diputadas del Partido Republicano, como Sofía Cid y Catalina del Real, se sumaron al llamado, enfatizando que errores de este tipo ponen en riesgo vidas y reflejan un fracaso sistémico en la protección de las mujeres. Exigieron responsabilidades y medidas firmes para evitar repeticiones, subrayando la urgencia de un liderazgo comprometido con la seguridad y dignidad femenina.
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