El ministro del Trabajo, Giorgio Boccardo, se ha pronunciado sobre la controversia generada por algunas tiendas de retail que decidieron abrir sus puertas este Viernes Santo, enfatizando la postura del Gobierno frente al dictamen de la Dirección del Trabajo. Boccardo afirmó que el dictamen actual es suficiente y recalcó la necesidad de una discusión más sistemática sobre los feriados, distinguiendo claramente entre la protección de los derechos de los trabajadores que históricamente han tenido libre este día y la propuesta de convertirlo en un feriado irrenunciable. Además, subrayó las implicaciones económicas de agregar más feriados irrenunciables, citando preocupaciones similares expresadas por el ministro de Hacienda, Mario Marcel. El debate sobre el Viernes Santo como posible feriado irrenunciable ha resonado tanto en el sector laboral como en el económico. Mientras las tiendas como Falabella, Paris y Ripley han optado por operar ese día, provocando el descontento de grupos de trabajadores, el Gobierno ha tratado de equilibrar los derechos laborales con las necesidades económicas. Aunque la idea de un feriado irrenunciable fue respaldada por algunos parlamentarios y esperaban avanzar con la legislación antes del 18 de abril, la discusión ha sido postergada. En medio de estas tensiones, Boccardo ha prometido que la Dirección del Trabajo actuará contra cualquier infracción a los derechos de los trabajadores, reafirmando el compromiso del Gobierno con la protección laboral sin expandir innecesariamente el número de feriados.
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