Un verdadero escándalo se vive en Perú, tras el sorpresivo allanamiento, por parte de la policía, de la vivienda particular de la Presidenta Dina Boluarte, investigada por la justicia por el delito de enriquecimiento ilícito y omisión de consignar declaraciones en documentos públicos. El caso, originado tras una investigación periodística sobre una presunta colección de relojes de alta gama, que la mandataria no había consignado entre sus bienes, ha generado controversia pública en dicho país. El allanamiento, que consideró además las oficinas de Gobierno, fue ordenado por el Juzgado Supremo de Investigación Preparatoria, presidido por el juez supremo, Juan Carlos Checkley, a pedido del Fiscal de la Nación. La acción judicial, fue realizada en la madrugada de este sábado, hecho en el cual intervinieron unos 40 agentes y fiscales “con el fin de registrar la vivienda e incautar los relojes Rolex” cuya procedencia y compra, Boluarte ha evitado precisar. El operativo policial, fue retransmitido por la televisión, donde se aprecia cómo los agentes rodearon la vivienda ubicada en el distrito de Surquillo, al este de Lima, y hacen una barrera humana para impedir el tráfico de vehículos en las calles. “La irrupción al domicilio tiene fines de registro e incautación”, aseguró la policía. La mandataria peruana calificó el hecho como “una medida arbitraria, desproporcionada y abusiva”.
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