Un fuerte terremoto con una magnitud de 6,1 en la escala de Richter sacudió el sábado por la noche a la isla más septentrional de Japón, Hokkaido, según el Servicio Geológico de Estados Unidos. El epicentro se ubicó a una latitud de 42,8 grados norte y una longitud de 145,1 grados este, y se produjo a una profundidad de 60 kilómetros. A pesar de la magnitud del evento sísmico, no hubo alertas de tsunami emitidas para las costas del Pacífico, incluídas las chilenas. Los primeros reportes señalaron que no hubo heridos o daños de importancia. Japón se encuentra en el «Anillo de Fuego» del Pacífico, un arco de intensa actividad sísmica que se extiende por el sudeste asiático y la cuenca del Pacífico. Las normas de edificación japonesas, al igual que las chilenas mantienen un estricto control sobre las construcciones, las cuales deben hacerse bajo sólidos protocolos antisísmicos.
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