China no informó de nuevas variantes de COVID-19 durante el reciente aumento de casos desde que el país relajó su rigurosa política de cero-COVID, según un estudio publicado en la revista médica The Lancet. Según el estudio, el análisis del genoma de 413 nuevas infecciones por COVID-19 en Beijing, entre los tiempos en que el país relajó sus políticas de control pandémico más estrictas, indicó que todas fueron causadas por cepas existentes. China decidió levantar sus restricciones de cero COVID en diciembre de 2022 en medio de protestas contra el rígido bloqueo durante varios meses. Después del levantamiento, el gigante asiático experimentó un aumento en los casos de coronavirus, lo que llevó a más de 12 países a imponer restricciones de viaje a los visitantes que llegan desde el país. Los autores del estudio sugieren que las conclusiones pueden verse como una instantánea del estado pandémico actual de China.
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