Tras la polémica que se suscitó por la solicitud del Minsal, de dejar de utilizar el body scan en cárceles, por los problemas de salud que podría provocar, todo volvió a fojas cero. Distintos sectores habían lamentado la medida, como la Asociación de Gendarmes de Chile, cuyo Presidente, Pablo Jaque, la consideró “insólita” y un “despropósito”, mientras que diputados de oposición la criticaron abiertamente. Tras la controversia, el Minsal decidió desistir de la medida y dejarla sin efecto, por lo cual se seguirán usando en instalaciones de Gendarmería y Sename.
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