“3,640 metros de altura no son poca cosa. Y si a ello le sumamos una lluvia torrencial que dejó la cancha en condiciones extremas para jugar un partido de esta transcendencia, entonces el orgullo es mayor”. Así resumieron su sentir el entrenador y dirigentes del Blackburn Roberts en el Twitter de la cuenta oficial del Club, donde no escatimaron loas para resaltar que su máxima figura, Ben Brereton, “nunca paró de correr los 74 minutos que jugó contra Bolivia”.
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